La Polícia Civil de Rio de Janeiro interceptó un plan paramilitar para asesinar al diputado estadual Marcelo Freixo, del Partido Socialismo y Libertad (PSOL) de Rio de Janeiro, que iba a darse el último sábado (15). El parlamentario iba a participar en un evento con militantes y profesores de la red particular de enseñanza en uno de los barrios de Rio. Esta información se presentó en un informe confidencial de la policía, al cual el periódico O Globo tuvo .
El diputado habló durante una rueda de prensa, en la tarde del pasado viernes (14), en la sede de la Asamblea Legislativa. La cultura de la violencia y al discurso raso que contrapone las políticas de seguridad pública y la defensa de los Derechos Humanos fueron señaladas como componentes del actual escenario do Rio de Janeiro de crisis profunda, tanto para la política, como para la propia democracia.
En su discurso, él abordó también los repercusiones del asesinato de la concejala Marielle Franco, a comienzos de este año, y también los diez años de la Comisión Parlamentaria de Investigación (I) de las Milicias, que el presidió, el día 10 de diciembre.
“Sufrimos decenas de amenazas a lo largo de estos diez años. Amenazas que vienen de orígenes muy distintos, todas oficialmente comunicadas por la Secretaria de Seguridad como lo fue esta”, dijo al diputado.
Freixo destacó también la fuerza y el tamaño de los grupos criminales que actúan en el Estado.
“Es inisible creer que en un Rio de Janeiro donde una concejala es brutalmente asesinada sin que el crimen haya sido esclarecido, exista un grupo criminal dominando una cantidad tan grande de territorios, capaz de matar, capaz de amenazar y de explotar a una cantidad tan grande de gente”, dijo.
Para Freixo, la situación llegó a este punto debido a la falta de articulación y profundización de ideas dentro del Poder Público.
“Esto es resultado de una seguridad pública que entiende que los Derechos Humanos son otra cosa. Una cosa que estorba a la seguridad pública. Esa cultura de la guerra, que opone Derechos Humanos y seguridad pública hace que tengamos una cantidad enorme de defensores de derechos humanos, sean autoridades públicas o no, amenazados o muertos. Y hay también, al mismo tempo, un número enorme de policías muertos. Eso tiene que acabar”, dijo.
El diputado aprovechó la rueda para, otra vez, derrocar uno de los mitos que involucran la actuación de los defensores de derechos humanos.
“Un defensor de Derechos Humanos no es un defensor de delincuentes, al contrario, los delincuentes quieren matar a los defensores de Derechos Humanos. Los defensores de Derechos Humanos defienden la ley. Y la ley no puede permitir que un grupo tan peligroso, tan violento, domine la vida de las personas”, comentó.
El plan de los criminales, según lo que investigó la policía, era asesinar al diputado el sábado 15, durante una agenda en Campo Grande, en el interior del Estado.
Esta no es la primera amenaza de muerte que Freixo recibe. El diputado presidió la I de las Milicias en 2008 y, desde entonces, cuenta con protección policial debido a las amenazas constantes.
Por Twitter, el diputado federal electo, criticó el hecho de que, incluso con los resultados positivos de la I, nada se hizo para combatir a la “mafia” carioca.
“En el mes que la I de las Milicias cumple 10 años, volví a ser amenazado. La I fue un hito en el combate al crimen: más de 200 acusados y los principales jefes presos. Presentamos 48 medidas para enfrentar a la mafia, pero no hicieron nada”, escribió el diputado.
