El ministro de Justicia y Seguridad Pública de Brasil, Sergio Moro, anunció este lunes (9) el envío de la Fuerza Nacional de Seguridad Pública para investigar las circunstancias del asesinato de de los indígenas Guajajara en el municipio de Jenipapo das Vieiras (estado de Maranhão), ocurrido el último sábado (7).
En la ocasión, murieron los indígenas Firmino Prexede Guajajara y Raimundo Bernice Guajajara. Ellos volvían de una reunión con integrantes de Eletronorte y de la Fundación Nacional del Indio (FUNAI) cuando fueron sorprendidos por un automóvil Chevrolet Celta blanco, de vidrio espejado, de donde salieron los tiros.
Moro informó que la Policía Federal (PF) asumirá las investigaciones del caso, "a fin de evitar cualquier nuevo incidente criminal".
Meses de silencio
La región donde ocurrieron los asesinatos es escenario de conflictos entre indígenas y madereros. El mes pasado, a 280 km de allí, el "guardián de la selva" Paulo Paulino Guajajara, de 26 años, fue asesinado en una emboscada en el Territorio Indígena Arariboia, en Bom Jesus das Selvas (MA).
Conforme reveló el portal Amazônia Real, Francisco Gonçalves, secretario estadual de Derechos Humanos, envió un oficio a la PF y al Ministerio Público Federal (MPF) informando que los guardianes de la selva sufrían “amenazas constantemente en relación a la actuación ilegal de madereros en la región” y “pidiendo las providencias que quepan en el ámbito de sus atribuciones”. El dia 23 de septiembre, Gonçalves envió un segundo oficio, directamente a Moro, “para conocimiento y toma de providencias en cuanto a la protección de mujeres, ancianos y niños indígenas, en el Territorio Indígena Gobernador, localizado en el municipio de Amarante”. No hubo respuesta.
El Consejo Indigenista Misionero (CIMI) contabiliza, en total, 43 asesinatos de indígenas Guajajara entre 2000 y 2019 en situación de conflicto de tierra con madereros.
